Review: «Arachnids in the UK» Doctor Who 11×04 – Con Té de TARDIS

«Todos los seres vivos tienen el mismo instinto, regresar a casa.»

Tras un emotivo y fascinante episodio que nos trasladó a un hito histórico a nivel mundial como es el que incluye a Rosa Parks y el posterior movimiento de Martin Luther King, llega el momento de volver al hogar. Un lugar que no siempre es la cálida casita con chimenea que garabateábamos de niños. No, en ocasiones se asemeja más a una gélida telaraña que nos atrapa en nuestra dolorosa introspección o en la mecánica rutina. Pero esto sería el resumen de una sensación que mejor dejamos en la sala de espera hasta que lleguemos al último párrafo.

Esta semana en «Con Té de Tardis».

– Noticias
Gemma Ayats nos hablará sobre todas las novedades relacionadas con el mundo whovian.

-La review sónica Doctor Who 11×04 «The Arachnids in the UK»
Emitido el domingo 28 de octubre en BBC One, con una audiencia de 6,43 millones de espectadores.
Sin fecha de emisión prevista en España (¡Netflix daros caña!)

– El Vórtice temporal
Rafa Casette nos habla esta semana sobre las Time Ladies

– Las torres de Darillium
David Mulé nos trae un tema musical de la BSO de Doctor Who. Esta semana «The Enigma of River Song».

Presentado por Carolina Fraile, con David Mulé, Gemma Ayats, y Rafa Casette.

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Comencemos por el principio: la fobia a las arañas. Quizá sea su forma, sus patas, su manera de cazar. Quién sabe. Pero es algo con lo que no sabemos lidiar. La aversión hacia ellas nos conecta a la mayoría de seres humanos y, por supuesto, el cine nos lo recuerda. A veces lidiando con el terror como en Aracnofobia (Arachnophobia, 1990), otras añadiéndole toques de humor negro como en Arac Attack (Eight Legged Freaks. 2002) o materializándola en la metáfora de la inercia y el sentimiento de estar atrapado como en la enigmática Enemy (2013). Todo ello sin olvidar que no es la primera vez que Doctor Who se enfrenta a estos seres de ocho patas. Ya lo hizo en 1974 en el arco El Planeta de las Arañas. Podríamos afirmar que, en el capítulo que hoy comentamos, ubicamos referencias a todos estos aspectos además de seguir la estructura de clásicos como Alien (1979) y La Cosa (The Thing, 1982).

Tras los hipnóticos títulos de crédito accedemos a lo que parece ser el interior de un lujoso hotel con una atmósfera turbia. Dentro del mismo, nos encontramos con Chris Noth, el mítico Mr. Big de Sexo en Nueva York y del que no hace mucho tuvimos la ocasión de disfrutar en un gran papel como es el de Don Ackerman en Manhunt: Unabomber. Aquí interpreta al arrogante y afamado dueño del hotel Jack Robertson, cuyo sueño es llegar a ser Presidente de los Estados Unidos. Es tan esnob que incluso sus visitas al baño están programadas (sic). En la misma localización, encontramos a dos personajes más: su guardaespaldas Kevin y su asistente Frankie. Jack está muy tenso y le pide a esta última que solucione un grave problema que les impide inaugurar el local y que puede tener consecuencias nefastas para su futuro político. En este instante irrumpe Najia Khan, madre de Yasmin y empleada del hotel, siendo despedida por el dueño sin explicación alguna. ¿Qué es lo que está pasando?

Mientras tanto, nuestra querida TARDIS llega por fin al punto de partida: Sheffield, Inglaterra. Según la Doctora, solo pasó media hora desde que se marcharon de allí, por lo que nadie se dio cuenta de su ausencia. Es el momento de que Ryan, Graham y Yasmin se despidan de ella y vuelvan a sus vidas. Pero son incapaces de hacerlo y nuestra heroína acepta una invitación para tomar el té en casa de Yasmin. Ryan les acompaña mientras un apenado Graham decide volver a su hogar y enfrentarse a al vacío dejado por Grace. Vacío ahora ocupado por telas de araña.

En el pasillo de la planta donde Yasmin tiene su apartamento, la Doctora repara en dos cosas: una imponente telaraña en el techo y una chica nerviosa que llama insistentemente a la puerta de una tal Anna. Recibidos por la hermana y el padre de la oficial, este les habla de una conspiración relacionada con los residuos y Yasmin se marcha para recoger a su madre después de que esta la llame con urgencia. Aprovechando que el padre de Yasmin cree que su vecina Anna puede tener un paquete suyo, la Doctora decide acercarse e investigar qué ocurre con ella. Descubrimos que la chica desesperada que intenta ponerse en contacto con la inquilina se llama Jade McIntyre y es doctora especialista en arácnidos y antrópodos. Nuestra protagonista consigue abrir la puerta para hallar el cuerpo de Anna sobre su cama cubierta de telarañas. En ese momento, un arácnido mutante del tamaño de un gato, sale (como no podía ser de otro modo) de debajo de la cama. La Doctora consigue retenerlo en la habitación con ajo y vinagre, pues forman un poderoso repelente. Tras este enfrentamiento, McIntyre les explica que las arañas de toda la ciudad se comportan de manera muy extraña y que los experimentos que lleva a cabo en su laboratorio pueden tener relación. También vuelve Graham, que después de tener visiones de Grace, hablándole de cuándo tirar la basura y el reciclaje, descubre que una araña gigante mudó su piel allí. Además de una carta escrita por el padre Ryan, y dirigida a este.

Una vez en el laboratorio de Jade, al observar un mapa de los avistamientos de arañas mutantes, la Doctora se da cuenta de que ellas marcan una dirección: el hotel donde trabaja la madre de Yasmin. Además, nos cuenta parte de una anécdota que hablaba de una telaraña gigante y Amelia Earhart, quien fue la primera mujer en cruzar el Atlántico en avión, y que desapareció en extrañas circunstancias.

Ajena a todo lo que está sucediendo, Yasmin llega al hotel para recoger a su madre y Robertson le explica que la causa del despido es la mala limpieza de las habitaciones. Todas están llenas de tejidos arácnidos. El dueño se marcha para atender una de sus «visitas programadas al baño» y es atacado por una araña gigante que sale de la bañera, destrozándola con su fuerza. Kevin, su guardaespaldas, intenta detenerla pero acaba cubierto por las redes de la enorme criatura y y es arrastrado al agujero.

La Doctora, Ryan, Graham y Jade llegan al hotel. En conjunto, llegan a la conclusión de que lo mejor es huir, pero no lograrán su objetivo: las arañas fueron lo suficientemente rápidas para bloquear las salidas con su flujo. El hotel es su nuevo hogar, y todos los que en él se encuentran son las moscas. Deciden entonces adentrarse en las profundidades del edificio con la finalidad de aclararlo todo. En su camino, paran en la cocina para darle vueltas al asunto, y aquí se produce una conversación genial, donde La Doctora piensa que Robertson es Ed Sheeran, y conocemos que este tipo se lleva mal con Donald Trump, y sólo por eso se quiere presentar a presidente de EEUU. Ryan y Graham son enviados a buscar una araña grande, y los demás irán a buscar planos del hotel. La madre de Yaz, Najia, piensa que la Doctora y Yaz se están viendo, Robertson disfruta de la conversación, y descubren que el hotel está construido sobre una mina de carbón. Descienden al sótano del hotel, y encuentran los cuerpos dentro de capullos, de Frankie y Kevin. La Doctora entiende que las arañas no quieren matar ni alimentarse. Simplemente están confusas y no saben lo que están haciendo. Es entonces cuando el dueño expone que el hotel está construido sobre los desechos que otra compañía suya, JLR, almacena. Esta compañía también se encarga de recoger los cuerpos de las arañas utilizadas en los experimentos del laboratorio de McIntyre. Ambas doctoras deducen que alguna de las arañas pudo llegar viva y alimentarse de dichos residuos para sobrevivir, lo que originó la nueva raza mutante. El espécimen más grande es la madre y las demás sus crías. Algunas habrían conseguido llegar al exterior, alterando el ecosistema de los arácnidos en su totalidad.

Robertson, les lleva a su habitación del pánico, y allí decide que la mejor opción es armarse. «¿Por qué no hacen lo que la gente normal haría? Tomar un arma y disparar como personas civilizadas». La Doctora se opone. Es culpa del ser humano todo lo acontecido. Deciden encerrar a todas las arañas en la habitación del pánico, y realmente nunca llegamos a saber dónde llevarán a la araña madre, un engendro que sólo tiene miedo, quizá más que ellos, aunque no lo pareció la primera vez que apareció, después de conocer que la carta del padre de Ryan decía que se fuera a vivir con él, pero Ryan no está dispuesto a eso.

Es hora de enmendar los errores. Consiguen encerrar a todas las arañas en la habitación del pánico, gracias a una canción de STORMZY – Know Me From. Por otro lado, reúnen material para tratar de azuzar a la araña gigante, aunque es demasiado tarde para hacerlo. Cuando se encuentran con la araña madre, ésta apenas es capaz de respirar correctamente a causa de su tamaño. Se muere. Jack Robertson se acerca y le dispara a quemarropa. Ante el enfado de la Doctora, él se defiende aclarando que «esto es lo que me llevará a la Casa Blanca», poniendo de manifiesto una crítica feroz hacia los individuos insensibles y apáticos que terminan ocupando dicho cargo y su oda a las armas y a la violencia como himno personal. «Dios nos ampare», afirma Graham.

Al final del episodio, Graham, Ryan y Yasmin deciden formar equipo con la Doctora y dejar su vida anterior atrás. Para sobrellevar el duelo, para evitar la rutina de un trabajo desmotivador o para distanciarse de una familia un pelín absorbente. La TARDIS representa su nuevo hogar. El equipo Tardis, se prepara para viajar.

Tiremos de la palanca y vivamos nuevas aventuras. A ser posible, que no nos hagan desconfiar de lo que puede habitar bajo nuestra cama o en en el fondo de la bañera.